Hola a todos! Se que abandone el blog pero realmente fue por una buena cuasa... na mentira ahora que lo pienso no lo fue pero bueno, por una cosa o por otra tenía que dejar para mas tarde el blog y se postergó. Ahí va una nueva entrada: espero que les guste!
Gritos, voces, palabras se confunden en el aire. Letras en un torbellino sin sentido. Colores oscuros se despliegan sobre sus ojos y lo envuelven, 11 luces destellan sobre su cara, tenues. Gritos y golpes. Su mirada más perdida que pez en un estanque, causa tristeza. No oye, no escucha, no siente. Aplausos y humo en espiral. No era feliz.
Su único refugio era la fantasía, su mundo perfecto. Un mundo de paz y tranquilidad donde los monstros son combatidos con armas de papel y los buenos siempre ganan. Donde el lenguaje es caballeroso y los hombres pintorescos. Donde las decisiones pueden volverse atrás con tan solo girar la hoja, donde los romances duran eternidades y donde nadie puede arruinar su vida. Nadie puede apartarlo, el es el mejor. Jamás alguien lo volverá a molestar.
Acepto que el niño es un poco raro y que muchas veces tuve ganas de pegarle, pero con esa mirada vacía de amor, llena de tristeza y desbordante de juegos de playstation, me puse a pensar que tal vez la solución rápida de comprar algo para llenar el vacío no sea la mejor.

Ahora díganme: quien recuerda la última vez que saliste a caminar con tu madre y juntaron caracoles para hacer pulseras? Quien recuerda la última vez que ganaste con tu equipo y compraron una coca entre todos? La última vez que regalaste algo a alguien que no tuviera? Puedo responder esas preguntas con fecha y hora exacta. Lo recuerdo, porque son cosas que llenan a uno como persona. Lo material llena, no lo niego pero es solo por unos instantes. Este otro tipo de recuerdos duran para toda la vida, y nunca se borran.